|
CONSEJO UNITARIO DE TRABAJADORES CUBANOS (CUTC) El Consejo Unitario de trabajadores Cubanos (CUTC), el Instituto Cubano de Estudios Sindicales Independientes (ISECI), el Buró de Asesoramiento Jurídico Independiente (BAJIL), la Agencia de Prensa, la Biblioteca Independiente Emilio Máspero y las Delegaciones Provinciales y Municipales independientes afiliadas, en uso de los derechos morales y civiles que nos asisten, y ante el inicio de un nuevo año sin solución a la crisis que atraviesa la nación, corroboramos nuestro Proyecto EL TRABAJO ES PARA VIVIR, plasmado en múltiples documentos elaborados a lo largo de estos años, donde se reafirma nuestra opción histórica por el libre sindicalismo y la democracia sindical, a la vez que ratificamos nuestros principios y valores básicos, resumidos en las siguientes
OBJETIVOS
El Consejo Unitario de Trabajadores Cubanos está convencido de que el trabajo reviste un valor superior al del capital, o cualquier otro elemento de la actividad económica; en consecuencia, defiende los valores de libertad, justicia social y solidaridad que animan las luchas del movimiento sindical a lo largo de su historia, para afirmar la dignidad de los trabajadores y garantizar el reconocimiento de sus derechos fundamentales en el lugar de trabajo y en la sociedad.
El Consejo Unitario de Trabajadores Cubanos propugna que la realización de estos valores requiere un sindicalismo de transformación social, que agrupe y movilice sus fuerzas a fin de: a) garantizar un desarrollo durable y solidario, orientado a eliminar la pobreza y a un reparto equitativo de la riqueza, b) garantizar el acceso a los bienes y servicios públicos y a la creación de empleos dignos para todos, c) afirmar el derecho a la autodeterminación, a vivir en democracia bajo el gobierno de su elección, libres de cualquier forma de opresión, explotación y discriminación,
CONSIDERACIONES GENERALES
PRIMERO: Que los cubanos dispongan de su naturaleza humana y espiritual, garantizada en el pleno ejercicio de sus derechos civiles, económicos, sociales, culturales y jurídicos.
SEGUNDO: Que ninguna persona, institución o ideología se sitúe por encima del derecho a la vida, interpretado como el más inviolable de los derechos de la persona.
TERCERO: Que los cubanos tenga reconocido y legalmente garantizado el derecho a disfrutar de los bienes materiales y espirituales, a la vez que a una actuación protagónica y responsable en las diversas esferas de la vida económica, política, social y cultural de la nación.
CUARTO. Que los cubanos tengan derecho a la propiedad privada, colectiva y a los beneficios legales y morales derivados de este derecho, sin otra limitante que no sea el respeto al derecho ajeno y al disfrute de idénticas prerrogativas.
QUINTO: Que la libertad se considere una condición inseparable de la persona y no se interprete como un privilegio legalmente concedido.
SEXTO: Que ningún cubano sea injustamente detenido, discriminado, molestado o reprimido en el ejercicio de su libertad individual, ejercitada en forma responsable y creativa, adecuada a los valores de la civilización y al respeto a la libertad de los demás.
SÉPTIMO: Que nos pronunciamos por un mundo más humano, justo e interrelacionado, capaz de elaborar proyecto que promuevan el diálogo, la integración y la negociación, en función del mejoramiento y el mantenimiento de la paz, a través de intercambios periódicos en el terreno económico, tecnológico, científico y cultural entre todas las naciones del planeta.
OCTAVO: Que repudiamos la ejecución de actos terroristas, secuestros y toma de rehenes civiles inocentes.
NOVENO: Que nos pronunciamos en contra de las desapariciones, las torturas y los encarcelamientos arbitrarios; sí favorecemos la creación de partidos políticos con una fuerte base social.
DÉCIMO: Que apoyamos la creación de organizaciones no gubernamentales que velen por el cumplimiento de los derechos humanos y respaldamos el diálogo al más alto nivel que profundice y consolide los procesos de democráticos.
DÉCIMO PRIMERO: Que respaldamos la consulta popular sistemática cuando sea necesaria, ante la aparición de fenómenos que amenacen la paz, la estabilidad y el desarrollo.
DUODÉCIMO: Que nos pronunciamos a favor de:
a) La libertad sindical, b) la amnistía general e incondicional a los prisioneros por motivos políticos y de conciencia, c) eliminar las normas establecidas en el Código Penal que obstaculizan el libre ejercicio de los derechos individuales, d) la observancia de las normas internacionales relativas a los procesos judiciales, cárceles y prisiones, e) otros.
DÉCIMO TERCERO: Que nos pronunciamos en contra de:
a) la persecución a los sindicalistas independientes, b) la pena de muerte, c) las decisiones derivadas del sistema de centralización de recursos y decisiones, d) la represión, hostigamiento y encarcelamiento de las personas que promuevan ideas y transformaciones democráticas, e) las detenciones arbitrarias, f) los Congresos no reivindicativos, g) la censura, como practica habitual de los medios de comunicación y la persecución de los periodistas independientes. h) Otros.
AMERICANISMO
PRIMERO: Que reconocemos a Cuba como una parte inseparable de Ibero América y del mundo, por nuestra historia, cultura, intereses nacionales más autóctonos, por nuestra lucha en contra del colonialismo, las formas de marginación social, discriminación y explotación, indisolublemente unidas a las naciones y pueblos ibero americanos.
SEGUNDO: Que nos pronunciamos por la creación y permanencia de un clima que desaliente las tenciones en ibero América y establezca una vía segura para el intercambio de ideas y experiencias, creando un modelo de integración ajustado a las mejores tradiciones democráticas proclamadas por los próceres de nuestras luchas por la independencia
SOLIDARIDAD
PRIMERO: Que la solidaridad presida los programas de integración, particularmente el referido a la lucha contra la progresa, las enfermedades, el analfabetismo y en medida significativa contra el nocivo hábito de convertir las ideologías en productos exportables.
SEGUNDO: Que interpretamos la solidaridad como la benevolencia activa, consciente y dedicada al prójimo, manifestada –sobre todo- en los momentos difíciles y cuando el bien común esté amenazado.
TERCERO: Que rechazamos la lucha entre las clases sociales, la idea de las rivalidades entre los diferentes grupos e intereses que conforman la sociedad, porque la solidaridad debe estar orientada hacia la construcción de valores y no hacia su destrucción.
CUARTO: Que la solidaridad interpela solo al otro ser humano, siendo simultánea, universal y personalista, de ahí el respeto mutuo.
JUSTICIA SOCIAL
PRIMERO: Que la justicia social preserve la promoción de la persona y permita la distribución equitativa de la riqueza, con pleno acceso a los diversos sectores sociales, los bienes materiales, culturales, espirituales y al ejercicio democrático del poder.
SEGUNDO: Que los objetivos de la sociedad cubana se dirige a la búsqueda del bienestar colectivo.
TERCERO: Que la sociedad cubana promueva medidas que coadyuven al desarrollo y ejercicio de los derechos humanos, interpretados integral y dinámicamente, concediendo a los cubanos un protagonismo fundado en criterios de tolerancia, libertad, justicia e independencia.
CUARTO: Que los valores de la democracia., el estado de Derecho, las prácticas de la sociedad civil, el pluralismo político, el respeto a los derechos integrales de la persona y las libertades individuales fundamentales constituyan la base sobre la cual descansen las relaciones civiles y políticas, con irrestricto apego a los principios de soberanía nacional, igualdad ante la ley, gobernabilidad democrática, equidad, justicia social y paz.
QUINTO: Que la autodeterminación y auto elección del sistema político debe producirse en condiciones de independencia y soberanía personal y determinarse a través del voto popular en elecciones multipartidistas, donde el ciudadano elija libremente entre varios programas políticos y ser elegido sin restricciones.
SEXTO: Que interpretamos la solidaridad como el reconocimiento a la dignidad humana y la justicia social, a través de la igualdad de derechos y oportunidades, basados en el respecto a las especificidades individuales.
SÉPTIMO: Que interpretamos la paz como fruto de un legítimo sistema de justicia social que involucre que todos los sectores y a favorezca la consolidación de la cultura.
FAMILIA
PRIMERO: Que la familia cubana ejerza adecuadamente sus roles esenciales, fundamentalmente en la responsabilidad y autoridad de los padres, como parte del proceso de integración global a la sociedad.
SEGUNDO: Que las relaciones sociales se consoliden en el seno de la familia, por ser la mejor manera de insertarse en la sociedad, creando valores y formas de comportamiento éticamente perdurables.
EDUCACIÓN
PRIMERO: Que el sistema docente nacional contribuya a la formación de sentimientos de solidaridad y tenga como objetivo desarrollar la personalidad, permitiendo que los cubanos vivan, se comprendan y acepten de manera tolerante, responsable, plena y libre.
SEGUNDO: Que la educación esté al alcance de todos, promoviendo y fomentando los valores auténticamente cubanos, consolidando el papel del ser humano mediante una enseñanza exenta de componentes ideológicos y políticos que adulteren o falseen los fenómenos históricos, culturales, osciles, económicos y familiares.
CULTURA
PRIMERO: Que la cultura nacional se reconozca en los valores tradicionales de la cubana; que sea el resultado de nuestra idiosincrasia, entidad y experiencia, como condición básica para la superación de la crisis moral enfrentada por la sociedad, por ser la cultura una derivación de la experiencia que refleja las condiciones de la sociedad que la produce y está íntimamente ligada a ella.
SALUD PÚBLICA
PRIMERO: Que se mejore la calidad de los servicios de salud pública, mediante la permanencia de los médicos en sus centros asistenciales: policlínicas, consultorios, hospitales, entre otros.
SEGUNDO: Que la salud pública no se convierta en una carga para el presupuesto nacional ni dependa de decisiones centralizadas.
TERCERO: Que el Estado mantenga la fiscalización y el control de la salubridad en forma descentralizada, construyendo y mejorando las instalaciones sanitarias existentes y otorgando créditos que facilite la inversión a empresas de servicios médicos.
CUARTO: Que las diferentes ramas de la medicina y los servicios médicos de atención primaria, hasta los centros de investigación científica y producción de medicamentos, mantengan los precios actuales de la medicina y que este se otorgue en forma gratuita a los casos sociales, madres solteras y personas que en forma acreditada demuestren necesitarlas en esa forma.
QUINTO: Que la enseñanza de las ciencias médicas garanticen la formación de profesionales altamente calificados, sin consideraciones ideológicas y a partir de la libre elección de la carrera, por aptitud y vocación.
SEXTO: Que desaparezcan los privilegios en el acceso a los servicios de salud pública, eliminado las instituciones que brindan asistencia exclusiva a dirigentes de organizaciones estatales o de otra instancia.
SÉPTIMO: Que apoyamos preservar los aspectos positivos alcanzados en materia sanitaria durante las últimas décadas, antes y después del proceso político iniciado el 1º de enero de 12959, teniendo en cuenta que la salud humana es el bien más preciado de la sociedad y no debe ser objeto de campañas propagandísticas ni manipulaciones tendenciosas.
OCTAVO: Que por la experiencia y probada capacidad en la atención a enfermos, discapacitados físicos y mentales, ancianos, personas sin abrigo filial, etc., somos partidarios de que las instituciones religiosas establecidas en nuestro país participen en los planes de atención social, preservando las instituciones existentes y permitiendo introducir otras que amplíen dicha participación.
MEDIO AMBIENTE
PRIMERO: Que se preserve el medio ambiente, por su estrecha vinculación con la salud humana y se produzca una reforma de la política de conservación, equilibrio ecológico, mediante entidades no gubernamentales y otras que elaboren programas y estrategias de preservación del medio ambiente y mantengan la diversidad biológica y el ecosistema.
ECONOMÍA
PRIMERO: Que cada cubano tenga la oportunidad de convertirse en el centro, autor y fin de la actividad económica, por ser parte inseparable de la actividad social. Cuando se vuelve precaria y no satisface las necesidades personales y sociales, las relaciones interpersonales se enrarecen y deterioran.
SEGUNDO: Que las políticas de desarrollo económico se combinen con las normas de justicia social.
TERCERO: Que los factores de crecimiento económico tengan su meta en la sociedad, de forma tal que satisfagan sus necesidades colectivamente.
CUARTO: Que la acción combinada del Estado y los empresarios con iniciativa propia se conviertan en experiencias que aseguren la promoción y la dignidad de cada cubano y no experimentos efímeros que no garanticen empleo estable, realización profesional, modernización tecnológica ni transformación productiva.
QUINTO: Que el desarrollo económico es una tarea y no una meta nacional, por lo que no puede ser impuesto por modelos o experiencias que correspondan a otras realidades culturales, sociales, filosóficas, de identidad y geografía.
SEXTO: Que el desarrollo económico tiene una dimensión humana, por excelencia, y no es cuantificable solo por la suma de bienes creados, sino por el aumento integral, proporcional y armónico de la riqueza que se refleja en el espectro físico y espiritual de la persona, siendo, por tanto, sostenido y solidario.
TRABAJO
PRIMERO: Que el trabajo se asuma como un derecho y se aprecie como un acto de creación al servicio del bien común, ocupando un lugar superior a la organización del Estado y que sea la única vía de realización personal y fuente de riqueza personal y social.
SEGUNDO: Que los trabajadores participen en el diseño de los planes económicos y sociales a través de organizaciones sindicales, no gubernamentales y profesionales independientes.
TERCERO: Que asumimos la democracia como la genuina participación de los trabajadores en los diversos temas económicos, políticos y culturales, abriendo formas de acción viva y responsable en una atmósfera de solidaridad, respeto a la diversidad de enfoques y opiniones y al derecho de todos los sectores en un clima de tolerancia verdadera.
SINDICATOS
PRIMERO: Que luchamos porque la unidad y autonomía sindical de los trabajadores cubanos se base en: a) El libre sindicalismo, b) La democracia y en la independencia, c) En la genuina representación de los trabajadores, d) En el cumplimiento de los Convenios, Recomendaciones y Tratados Internacionales.
SEGUNDO: Que rechazamos las estructuras sindicales que emanen de directrices centralizadas que provoquen: a) Parasitismo e inoperancia, b) dependencia, c) burocratismo, d) intervención ajena a los intereses sindico-laborales, e) otras similares.
TERCERO: Que proclamamos la necesaria independencia de los sindicatos, sin la presencia de actividades partidistas y/o gubernamentales, con el claro y único compromiso de fraternidad entre todos y cada uno de los trabajadores cubanos, sin barreras ni distinciones de índole alguna.
CUARTO: Que la independencia y unidad sindical que fomentamos debe promover la reivindicación clasista, popular y nacional por: a) promoción, respeto y aplicación incondicional de la Declaración Universal de los Derechos Humanos, por ser Cuba firmante del mismo, b) promulgación de un Código de Trabajo en consulta con el movimiento obrero, a tenor de sus problemas laborales, dificultades y salario, acorde con el alza de los precios y el nivel de vida, c) promulgación de un Código de Administración de Justicia Laboral donde los trabajadores pueden reclamar sus derechos fuera del proceso administrativo actual, d) el cumplimiento de los Convenios de la Organización Internacional del Trabajo firmado y ratificados por la República De Cuba, desde su ingreso a dicha Organización de las Naciones Unidas, e) libertad de expresión y asociación con fines pacíficos, f) libre intercambio de ideas, g) respeto a las diversas formas que adopta la autonomía e independencia sindical, h) mejoramiento de la calidad y nivel de vida de los trabajadores, i) derecho a la huelga y otras formas pacíficas de lucha obrera, j) otras.
QUINTO: Que nos pronunciamos en contra de:
a) las medidas disciplinarias arbitrarias y desmedidas, b) la apatía laboral, c) las violaciones de las normas del derecho laboral por parte de los trabajadores, d) la indisciplina laboral, e) el no cumplimiento de las normas de Protección e Higiene del Trabajo, f) otras establecidas y no cumplidas por el trabajador.
SEXTO: Luchamos por:
a) Garantizar un desarrollo durable y solidario orientado a eliminar la pobreza, b) Un reparto equitativo de la riqueza, c) La protección del medio ambiente, d) El acceso a los bienes y servicios públicos y a la creación de empleos dignos para todos, e) Afirmar el derecho a la autodeterminación, a vivir en democracia bajo el gobierno de su elección, libres de cualquier forma de opresión, explotación y discriminación, f) reivindicar el respeto de los derechos humanos, particularmente los derechos de los trabajadores, g) promover la igualdad de género en el empleo y en todos los aspectos de la vida cotidiana, h) contribuir a realizar y mantener la paz, basada en la justicia y la seguridad para todos los ciudadanos, i) defender y promover los derechos y protección de los trabajadores en todo lugar y circunstancia, j) trabajar por instaurar un auténtico contrapeso sindical y una representación eficaz de los trabajadores en la economía nacional, k) fomentar la aplicación de las normas internacionales del trabajo, l) apoyar el desarrollo de sindicatos democráticos e independientes, entre otros medios mediante una cooperación sindical coordinada, m) denunciar cualquier violación de la libertad sindical, de los derechos de negociación colectiva y de huelga, n) organizar la solidaridad y las acciones internacionales necesarias para garantizar el pleno respeto, o) combatir todas las formas de racismo, xenofobia y exclusión, y garantizar los derechos de los trabajadores nacionales o extranjeros, p) desarrollar el diálogo social con organizaciones nacionales en defensa de los objetivos del movimiento sindical, q) promover y apoyar la coordinación de la acción sindical con vista a las empresas extranjeras, mixtas y de otras categorías, r) garantizar la plena integración de la mujer en los sindicatos y la promoción de la igualdad de género en sus órganos directivos, así como en sus actividades a todos los niveles, s) apoyar el derecho de los trabajadores y jóvenes a un empleo decente, a la educación, la formación y su plena participación en los sindicatos, t) establecer lazos y cooperación con otras organizaciones de la sociedad civil, para realizar los objetivos comunes., u) otros.
Dado en la Ciudad de La Habana, A los 28 días del mes de diciembre Del año 2005 |
Consejo Unitario de
Trabajadores Cubanos
|